Kobe Bryant se mete en el negocio de vender sus deposiciones por Internet
Tras su retirada del baloncesto eran muchos los caminos profesionales que el ex de los Lakers había considerado. Ganará más dinero que en la NBA.


Si existe, se puede vender.
Este dogma de la filosofía estadonunidense podría aplicarse a la última decisión de Kobe Bryant, quien tan solo una semana después de jugar el último partido de baloncesto de su carrera NBA ya tiene decidido cómo va a ganarse la vida desde ahora. Empezará a poner a la venta todos sus excrementos a través de los portales de compraventa más utilizados de la red y las casas de subastas más grandes de Internet., negocio en el que será pionero y algunos expertos calculan que podría otorgarle más beneficios que los que le ha proporcionado jugar al baloncesto.
Se había especulado con que Kobe se convirtiera en analista de televisión para las retransmisiones de los partidos de la NBA, o que compaginara las labores de embajador de la liga y de alguna multinacional importante, o incluso se llegó a barajar la posibilidad de que los Lakers le ofrecieran el puesto de entrenador, como hizo el Real Madrid con Zinedine Zidane.
Al contrario de lo que haceis vosotros en Wallapop, Kobe venderá su mierda en los portales más prestigiosos de todo Internet, en los que se mueve solo la gente VIP; empresarios, banqueros, deportistas de élite, músicos, actores, aristócratas... que podrán pagar cuantiosas sumas por las deposiciones de la leyenda del baloncesto. Los analistas estiman que el precio de cada mojón de Kobe podria oscilar entre los 80.000 y los 250.000 dólares, dependiendo del olor, tamaño, humedad y bacterias que se puedan encontrar en su interior.
A sus 37 años Kobe tiene todavía todo una vida de futuro por delante y muchos sueños profesionales por cumplir. Después de veinte años vendiendo humo por todo el mundo empezará a vender mierda solo a quien pueda pagarla.
Si a Bryant le sale bien el negocio, podría plantearse la posibilidad de abrir una agencia especializada en venta de mierda de famosos por internet, lo que abriría un nuevo y lucrativo mercado entre los colectivos de clase alta, que empezarán a coleccionar trocitos de la historia viva de nuestra época.